¿CUÁL ES LA RECETA PARA LA CRIANZA DE LOS HIJOS?

Mtra. Mónica Jasmín Montoya García

Universidad Nacional Autónoma de México. Facultad de Estudios Superiores Iztacala

Contacto: jazminmontoya@iztacala.unam.mx


Cita recomendada:

Montoya, M. (2019). ¿Cuál es la receta para la crianza de los hijos?. Revista de Divulgación Crisis y Retos en la Familia y Pareja, 1(2), 51-54. https://doi.org/10.22402/j.redes.unam.1.2.2019.236.52-55


Resumen

Las estadísticas reflejan la situación actual de los niños y jóvenes con respecto a su salud mental, conductas con problemas adicciones, pandillerismo, suicidios, violencia y problemas de conducta se ha intensificado en la actualidad. Es preocupante el ambiente social en el que actualmente viven nuestros niños y jóvenes, y la familia es un factor importante en la vida armoniosa de los hijos ¿hasta que grado?. Cuando los padres se involucran en la educación de sus hijos, amándolos, comunicándose, estableciendo reglas, límites con un NO a tiempo y que el padre se reconoce como valioso en la crianza de sus hijos, es entonces, cuando hay resultados positivos en la crianza. En el presente artículo se analizan algunos retos en la crianza de los hijos con respecto a la decisión de ser padres y el crecimiento personal que se requierepoder encontrar la receta para una crianza positiva.

Palabras clave: crianza positiva, crecimiento personal, familia, factor de riesgo


El INEGI (como se citó en Moreno, 2017) reporta en el 2015 que 4 de 10 suicidios son cometidos por adolescentes y jóvenes entre15 y 29 años. En ese mismo año alrededor de 300 casos de niños entre 10 y 14 años decidieron quitarse la vida.

Otro probelema que ha ido en aumento en dolescentes es el uso de drogas y alcohol ha aumentado entre los jóvenes y se ha convertido en una importante fuente de la frecuencia de consumo y mortalidad. Con respecto al  tabaquismo entre adolescentes de 10 a 19 años fue de 7.6%, siendo mayor en el grupo de hombres de 16 a 19 años (25.9%), que en mujeres de la misma edad (9.5%) (Comisión Nacional de las Adicciones, 2002).

El tema de violencia, sobresale, ya que es una las principales causas de muerte en niños y jóvenes relacionadas directa e indirectamente. Por ejemplo, los homicidios y los suicidios son causas predominantemente altas por el nivel de incidencia.

Por otro lado, la desnutrición, las deficiencias de nutrientes, el sobrepeso y la obesidad son los más importantes problemas de salud nutricional entre los adolescentes (Secretaria de Salud, 2006).

Por si fuera poco, la prevalencia de los desórdenes comportamentales han aumentado en la última década debido a las transformaciones sociales, culturales y educativas que se están experimentando. El porcentaje de trastornos de la conducta diagnosticados en los años 90 no llegaba al 5%, actualmente se ha  triplicado, considerando los problemas por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), problemas con las figuras de autoridad como el trastorno negativista desafiante (TND) y trastorno disocial (TD). El TND se presenta en un 4% en niños de 8 a10 años y durante la adolescencia (13-16 años) siendo más común en hombres que en mujeres. El TD se amplía hasta un 9% en la etapa de la adolescencia (Angulo, 2008, como se citó en Rabadán & Gimenez, 2012).

¿Cómo explicar estas cifras?, ¿Qué responsabilidad tenemos como sociedad que nuestros jóvenes y niños vivan en está condición de vida?, ¿Qué pensarán y sentirán los padres de estos niños y jóvenes?.

De forma concreta, uno de los factores considerados de mayor relevancia y que correlaciona de forma más positiva con el trastorno conductual y la conducta agresiva manifiesta por los niños y jóvenes, es el estilo de crianza de los padres (Raya, Pino & Herruzo, 2009).

Para describir más ampliamente como la familia es un factor de riesgo, cuando el estilo de crianza es ineficaz, con baja supervisión, baja estimulación cognitiva, falta de apoyo emocional, familias con consumo de drogas, maltrato, conflictos intrafamiliares, dificultades en la comunicación familiar y antecedentes de problemas de conducta de los padres, los hijos son vulnerables y desprotegidos antes las acciones y circunstancias negativas.

¿Cómo los padres podemos evitar y contrarrestar estos elementos?

Cuando un padre y madre deciden el primer hijo (si es que sucede de manera intencional) o cuando saben que serán padres, lo que piensan es ¿Quién y cómo será esta personita?, ¿Qué le daré?, ¿Cómo se lo daré?, ¿Qué tipo de madre o padre quiero ser? y más preguntas tal vez ante la emoción desconcertada de convertirse en padres.

A lo largo del crecimiento y desarrollo de los hijos el estilo de ser padre y madre se va construyendo y se ven los resultados en las conductas y comportamientos de los hijos, cuando son positivos la alegría está presente ante los primeros pasos, un reconocimiento académico, las primeras palabras, cuando están bien de salud, o simplemente felices. Pero cuando los resultados son negativos, ante las tristezas y frustraciones de los hijos, las dificultades en el logro de sus metas, problemas de conducta, bajo desempeño académico o enfermedad, el juicios de los padres hacia sí mismos es duro y se cree que se ha fallado, ¿qué se necesita para no fallarle a los hijos? (Barocio, 2016).

Es común escuchar que los padres piden saber cual es la mejor forma de educar, encontrar una receta. Para cocinar un producto una receta es necesaria, pero un hijo no es un producto, cada niño y niña tiene su propia esencia, trae consigo aprendizajes para los padres y al mismo tiempo les da la oportunidad de crecer como personas (Barocio, 2016).

Con los datos cuantitativos mencionados al incio de este artículo resalta la gran responsabilidad y la ardua tarea de ser padres, porque no sólo es nutrirlos, es amarlos con todo lo bueno y no tan bueno que tiene una madre o un padre, comunicar con claridad emociones y sentimientos, hacerlos sentir que son parte de la familia, establecer reglas y límites que los protegen y enseñan a protegerse, decir un NO a tiempo, que les permita manejar su frustración, respetar las reglas sociales que favorecen la convivencia social y sobre todo que ellos también aprendan a decir NO como elemento de protección.

Así como también, hacerles sentir que nos hacen felices con su existencia y agradecer todos los días que somos mejores padres y personas con todos los retos que nos ponen día con día.

Al respecto me gustaría destacar la valiosa idea de Barocio ( 2016, p. ix):

Te acompaño en tu transformación, con profundo respeto por tu persona, tu camino y tu destino, sabiendo que en el guiarte está mi propio aprendizaje. Porque tus retos, provocaciones y dudas me sacan de mi comodidad y me obligan a revisar nuevamente mis valores, mis creencias y mis prioridades. Me llevan muchas veces la congruencia de mis palabras y mis acciones. Sí, al ayudarte, me ayudo a mi mismo. Y así, también a través de tu búsqueda yo puedo aclarar la mía. En pocas palabras me ayudas a despertar. Entonces la receta es…tú y solo tú mamá y papá la saben, cuando conocen y crecen con su hijo.


Referencias

Barocio, R. (2016). Disciplina con amor para adolescentes. México: Pax.

Comisión Nacional de la Adicciones (2002). Encuesta nacional de Adicciones (2002). Recuperado de: https://www.gob.mx/salud/conadic/documentos/encuesta-nacional-de-adicciones-2002-ena-2002

Moreno, T. (2017). Adolescentes sector de riesgo: INEGI. Recuperado de: https://www.eluniversal.com.mx/nacion/politica/adolescentes-sector-de-alto-riesgo-inegi

Rabadán, J. A. & Giménez, A. M. (2012). Detección e intervención en el aula de los trastornos de conducta. Educación XX1, 15 (2), 185-212.

Raya, A. F., Pino, Ma. J. & Herruzo, J. (2009). La agresividad en la infancia: el estilo de crianza parental como factor relacionado. European Journal of Education and Psychology, (2) 3, 211-222.

Secretaria de Salud, (2006). OPS, Oficina Regional. División de Promoción y Protección en Salud. Programa de salud de la familia, población y salud del adolescente. Plan de acción de desarrollo y salud de adolescentes y jóvenes en las Américas. 1998. Recuperado de: https://www.paho.org/mex/index.php?option=com_docman&view=download&alias=507-salud-de-la-adolescencia&category_slug=documentos-de-referencia&Itemid=493


Las opiniones expresadas por los autores no necesariamente reflejan la postura del editor de la publicación. Esta revista es una publicación semestral en español, arbitrada, de acceso abierto y licenciamiento Creative Commons; puede ser reproducida con fines no lucrativos, siempre y cuando se cite la fuente completa y su dirección electrónica. De otra forma requiere permiso previo por escrito.